Hay tanto por escribir

Hay tanto por escribir, tanta tinta en cada día, en cada rincón, en cada beso, en cada noche, en cada
mirada, en cada caricia, en cada cara. Miles de historia, miles de palabras, miles de secretos esperando ser rebelados.

La ventana rebela un mundo fresco, antiguo y nuevo, un mundo en constante movimiento, y la pluma nos da la posibilidad de detener esos efímeros instantes, esos pequeños detalles destinados a desaparecer entre las aguas del tiempo, y plasmarlos en la memoria.

Aun hay miles de realidades por crear, miles de seres inimagiados, miles de planetas por descubrir, miles de personajes por escribir. Tanta tinta, tanto papel, archivos de word, pergaminos, tantas paredes, cuadernos y libretas, tanta piel esperando a que la escriban.

Hay tanto por crear, que ni la vida da, que ni el tiempo da para escribirlo todo... porque las horas se acabaran antes de que se acabe las cosas que espera por ser escritas, plasmadas, modeladas, pintadas, dichas, representadas, cantadas, inventadas, explotadas, destruidas y nuevamente reconstruidas.

Porque el mundo es todo en potencia, todo en todo en realidad y todo en destrucción.

Porque nosotros somos todo en potencia, todo en todo en realidad y todo en destrucción. una posibilidad abierta, un símbolo de interrogación, las manos que crean, una pluma deslizándose sobre el papel, una historia esperando ser escrita.